Estos días hemos sido conocedoras de un caso muy delicado en Argentina, del que en muchos casos los medios no se han hecho eco o lo han hecho de una forma misógina y sesgada. Por este motivo, nosotras hemos preferido escribir este comunicado para que podáis conocer los hechos de forma menos violenta.
A pesar de ello, avisamos que es muy posible que este contenido sea delicado, ya que se hablará de violencia sexual, drogas y violencia machista, entre otras cosas. Leed este comunicado con precaución.
Avisamos que es muy posible que este contenido sea delicado, ya que se hablará de violencia sexual, drogas y violencia machista, entre otras cosas. #JusticiaPatriarcal
Tweet
Los hechos
La víctima, de identidad anónima, una joven de 18 años, acudió a una entrevista de trabajo el sábado por la mañana. Dicha entrevista había sido concertada por Facebook y tras haber rechazado cenar el viernes con quien ofrecía dicha oferta, esto alarmó a la familia y a la víctima, por lo que la madre pidió que en cuanto estuviera el sábado allí, mandara foto de la fachada y la dirección.
Tras la entrevista, es contratada y comienza a trabajar en el negocio de forma normal. A lo largo de la mañana, el jefe le ofrece en numerosas ocasiones una bebida, ella acaba aceptando por educación y después de tomarlo notifica a su hermana por WhatsApp que se encuentra mareada y que cree que la han drogado. Esta actuación permite que la hermana avise rápidamente a la madre, quien se encontraba cerca del lugar, y esta denuncie los hechos a la mayor brevedad.
La policía irrumpe en el local tras encontrárselo cerrado y con la persiana a medio bajar, llegan a la trastienda y encuentran al acusado y a la víctima inconsciente, sin la ropa o con la ropa mal puesta y sucia, tumbada sobre el suelo. El acusado es trasladado a las dependencias policiales, donde es acusado de abuso sexual leve y puesto en libertad por no tener antecedentes. De nuevo, nos encontramos con que drogarnos no es violencia, con que no es suficiente como para llamar a las cosas por su nombre y hablar de violación. Nos encontramos con que un violador está en la calle, mientras que la víctima y su familia necesitarán muchísimo tiempo para recuperarse de este suceso.
Después de que se viralizara esta historia en redes sociales, donde nosotras mismas hemos podido conocer la noticia, han salido más víctimas de dicho violador. La situación con la violencia sexual sigue siendo la misma en todas partes, independientemente de que esta historia haya ocurrido en Argentina, ha ocurrido lo mismo que ocurre en España a diario: que los agresores salen impunes de las agresiones y las víctimas son doblemente victimizadas, primero por sus agresores y después por medios y sociedad en su conjunto.
Varias personas han organizado una protesta frente al local del barrio porteño de Balvanera para exigir la detención del acusado, cuya situación procesal se complicó al decidir la Justicia agravar la imputación. La jueza en lo criminal y correccional porteña Karina Zucconi en principio había imputado al comerciante el delito de «abuso sexual simple», pero en las últimas horas lo recaratuló como «abuso sexual agravado con acceso carnal», que contempla una pena de entre 6 y 15 años de cárcel. A pesar de ello, él sigue en libertad por no tener antecedentes.
Conclusiones
No podemos sino desear que esta joven pueda recuperarse y que se haga justicia ante esta situación que vivimos las mujeres a diario. Estamos cansadas de soportar cómo la violencia contra nuestros cuerpos no importa porque somos mujeres, cómo la violencia que vivimos a diario se justifica o se pasa por alto porque somos unas exageradas o es culpa nuestra por dónde, cómo o con quién estábamos. Estamos cansadas de que no se considere violencia que nos droguen en contra de nuestra voluntad para poder agredirnos sin que podamos defendernos.
Estamos cansadas de este sistema patriarcal y de esta falsa justicia que dice protegernos a todos mientras nosotras seguimos siendo violentadas.
Deja una respuesta